Es la frase que Jesucristo le dice a la Magdalena después de resucitar. "No me toques". Y si vemos la pintura de Frá Angélico, o del Tiziano, observamos en el Cristo un ademán como de guardar las distancias. Falta la mascarilla.
No quiero escandalizar, pero es lo que nos va a quedar del coronavirus. Una distancia medida. De respeto. Pero no a la persona, si no al jodido virus. María no sabía por qué se lo decía Jesús, ni el Maestro tampoco se lo aclaró. Pero nosotros hoy, y mañana, sabemos el por qué de no tocarnos...
Yo me resisto a hacerlo con mis hijos y mis nietos... Y si se me fastidia la pureza, mira lo que te digo, hay motivos por los que merece la pena arriesgarse, ¿no?..
Comments