Hace cuarenta años que España ingresó en la Otan. Recuerdo aquellas fechas y aquellas izquierdas y derechas enfrentadas por la pertenencia o no a la Alianza… Pensábamos que podíamos aprovecharnos tan lindamente de la entrada en la CEE y participar de todas sus ventajas, sin comprometernos en la defensa común de esas mismas ventajas. Como igual recuerdo aquel Referéndum, y la campaña que siguió el Psoe contra el ingreso en la misma, que encabezó un Felipe González con aquello “De Entrada, Otan No” y que le salió falluta, o le salió cojonudamente bien, porque nunca nadie se alegró tanto de perder una consulta (y es que, en aquella época, decía “no” con la boca de decir “sí”)… Lo de la doble moral de siempre: ideológicamente debía posicionarse en negativo, pero estratégicamente deseaba que resultara en positivo.
Imagínense, en la actualidad, si no existiese la Otan… Habría que inventarla deprisa y corriendo si no queremos que Europa acabe siendo entera objetivo de la Rusia soviética, con gobiernos títeres de Putin en todos los países… Hoy, el Psoe es un claro defensor de la pertenencia a la Alianza Atlántica, como es de lógica y sentido común, y solo sus socios, cavernícolas anclados a un izquierdismo de cheka y goulag, son los que aún tabarrean con sus idiotas reticencias… Claro que, es posible, puede ser, que su deseo oculto sea precisamente ese, que Putin someta a Europa, y a ellos, soviets de dacha y postureo, los nombre virreyes de las Españas… A mí, personalmente, no me extrañaría nada en esta gente, cromos de álbum decimonónico…
Su comunismo de cartón-piedra es tan gagá que no se dan cuenta (o no quieren darse cuenta) que el de Putin es un nazismo tan espantoso y asesino como el de Hitler. Que su locura apocalíptica amenaza con una guerra mundial y lanzar su arsenal nuclear contra todo el que no quiera plegarse a sus exigencias… o sí que lo saben, pero se lo callan. Porque resulta inexplicable su estúpida postura: antes de invadir Ucrania, y ante sus amenazas de hacerlo, este personal alucinado proponía la paz sumisa de la derrota; la entrega sin reservas a sus exigencias; una puesta de culo en toda regla… y después de la salvaje y criminal invasión, se oponen a que Ucrania y la propia Europa le griten a su admirado monstruo: no al enfrentamiento, no a las sanciones, no al envío de armas, no (siguen en su viejo colmillo retorcido) a la Otan… Esto es: no al derecho legítimo a defenderse.
“No son izquierdas, son mierdas”, me casi escupe, asqueado, un buen amigo… precisamente de izquierdas. Y me asegura, enfadado y convencido: “si el Psoe no se borra de una vez por todas de esta gentuza, yo me borro del Psoe para siempre”. Y lo dice con un cabreo del diez. La verdad es que – pensándolo serenamente – estos sucios socios le ha traído más problemas que soluciones al gobierno de Sánchez. Sus enfrentamientos (e incluso alguna que otra puñalada trapera, versus Pabliglesias) han sido mayores que sus acuerdos. Y me parece, y lo digo desde mi personal opinión, claro, que en las próximas elecciones les van a servir más de rémora que de ayuda. No sería de extrañar que le quite más votos que les dé. Pronto lo vamos a ver…
Me explico que Íñigo Errejón se separara de ellos como de la peste… Hay cosas básicas y esenciales que no se pueden compartir. En su reciente visita a Murcia para poner en marcha el Más Región de aquí, se desmarcó de sus correligionarios absolutamente, condenó sin paliativos la invasión rusa, y abogó sin tapujos ni disimulos por una respuesta dura y el envío de armamento a Ucrania… Y, la verdad, es que esto reconforta un poco. También Yolanda Díaz se ha alejado de sus agilipollados chicos y chicas de UP, por responsabilidad y sentido de Estado, o por dignidad, o por sentimiento humano, o aburrimiento, pero se ha ladeado de sus camaradas en esta cuestión. Vamos a ver si no les pasan factura en su proyecto unificador de la izquierda… claro que, para llevar a estos burricos del ronzal, más vale ir por libre y sola que mal acompañada. A lo mejor, por el camino se encuentra con el zagal del Más. Aquí valdría más un menos que el otro más que lleva a cuestas.
Pues esa izquierda hizo hacer el peor ridículo a Sánchez, cuando se desmarcó de Europa diciendo que España no ayudaría a Ucrania con armas, solo con sopicaldos y tirachinas, y, tras ver que Biden citó a todos los Jefes de Estado europeos menos a él (que anda loco por colgarse de los faldones del americano) rectificó y soltó lo de “es que yo quise decir diego, pero me salió digo” con esa cara pétrea de no decir nada, rectificando sobre la marcha… De auténtica pena la pana que lleva, óigan… Y es que estos extremosos bolcheviques, esos remeros del Volga que alimenta, hubieron aplaudido a Adolf Hitler el genocidio de judíos a cambio de que a ellos no los metieran en el crematorio, igual que su tótem Stálin condenó también a millones a muerte. Es que son muy sensibles, coñe…
MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ www.escriburgo.com miguel@galindofi.com
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